Ana Gomez
Las clases para personas con diversidad funcional, serán un espacio donde personas con capacidades diferentes tendrán un sitio para aprender a expresarse de diferentes maneras, disfrutar y compartir tiempo con otros.
Me presento, soy Ana Gómez y a parte de bailarina, soy terapeuta ocupacional colegiada y especializada en daño cerebral. Todos los días trabajo para que mis pacientes consigan tener la mayor independencia en su día a día, es algo que me llena plenamente y que quiero unir con mi otra pasión, la danza la cual me acompaña desde pequeña y tantas cosas me ha enseñado.
Queriendo dar una vuelta a la típica clase de baile, he querido unir mi pasión con mis conocimientos del cuerpo humano y la discapacidad para darle una estructura diferente.
- Primero, una introducción, donde se realizarán ejercicios de movilidad y calentamiento siempre desde un punto terapéutico y utilizando el juego como hilo conductor.
- Segundo, el núcleo de la clase, la coreografía. La idea es mezclar un aprendizaje individual con uno grupal, Se enseñaran diferentes pasos que tendrán que ser integrados con los que realicen los compañeros a traves de transiciones y posiciones. Fomentando el trabajo individual pero tambien el trabajo en equipo, y la memoria.
- Tercero, cierre. Se llevarán a cabo estiramientos y diferentes actividades de vuelta a la calma y consolidación de lo aprendido.
Me gustaría contaros algunas de las ventajas que tiene la danza:
- A nivel físico, fortalece el cuerpo, mejora la elasticidad de los tejidos, el equilibrio y la coordinación. La lateralidad se refuerza, el esquema corporal se integra. Las neuronas espejo se activan.
- A nivel cognitivo, la memoria visual y auditiva se entrenan y la atención y concentración se trabajan a fondo. Sin quererlo se aprende a planificar y secuenciar los pasos que luego tienen que ser realizados
- A nivel sensitivo, nuestros sistemas propioceptivo y vestibular cobran especial importancia encargados de nuestra postura, estabilidad y equilibrio. El oido y la vista nos ayudan en el aprendizaje de los pasos y a integrarlos con la música.
- A nivel emocional, se trabaja la tolerancia a la frustración, la autoestima y la confianza en uno mismo y en el compañero. La expresión de emociones e identificación de las mismas, comunicación con otros y disfrute. Además, al bailar se liberan hormonas como la serotonina, hormona de la felicidad, dopamina, que regula el estado de ánimo y endorfinas que funcionan como un analgésico natural.
- A nivel social, el trabajo en equipo es imprescindible, sin darte cuenta socializas con los compañeros, aprendes a comunicarte en público y generas un sentimiento de grupo y pertenencia participando en una actividad de ocio.
En esta clase lo que más nos importa es la diversión, la validez a través del movimiento de las capacidades y demostrar que con los medios adecuados las personas con discapacidad son muy muy capaces de hacer grandes cosas.